Agencia La Oreja Que Piensa. Marzo 2013. Por Diego Oscar Cabral Da Fonseca.
Miguel Ángel Peralta nació el 21 de marzo de 1946 en la maternidad del Hospital Tornú. Hijo de Virginia Peralta, de quién heredó su apellido, pasó gran parte de su infancia en un orfanato y bajo la protección de una pareja que lo apadrinó.
Más conocido como “Miguel Abuelo” lideró la formación de los Abuelos de la nada, banda formada a finales de los sesentas y que alcanzó la cima en la década de los ochentas, llegando con su música a varios países de América Latina.
Con mucha rebeldía, talento y creatividad, éste músico, poeta y cantante con un timbre de voz muy particular se hizo lugar entre las figuras del rock vernáculo compartiendo escena con los músicos de La Cueva.
Murió el 26 de marzo de 1988 en la clínica Independencia de Munro.
Sin dudas su muerte fue una gran perdida para el rock nacional.
Además fue el segundo eslabón de una dramática cadena de decesos encabezada por Luca Prodan y finalizada por Federico Moura en menos de un año.
Uno más en sumarse a la lista de los jóvenes, apenas 42 años, que partieron dejando un gran legado (“Vasos y besos” y “Los Abuelos en el Ópera –vivo-, entre otros), sin dudas una obra fundamental para entender un buen capítulo dentro de la historia del rock nacional.