Agencia La Oreja Que Piensa. Julio 2012.
El Servicio Paz y Justicia- SERPAJ-organismo de Derechos Humanos que preside el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel- repudia las torturas de la policía de Güemes en la Provincia de Salta, métodos que no fueron erradicados en la provincia y en el país y reclaman juicio y castigo a los responsables.
La vigencia de los derechos humanos no comienza ni termina desde 1976 hasta 1983, deben sostenerse y ponerlos en práctica en la vida democracia del país que se construye diariamente.
Es lamentable que las autoridades de la Provincia de Salta no hayan logrado erradicar prácticas aberrantes y degradantes como la tortura y maltrato a los internos y decir que lo ignoraban y reaccionar después de ser denunciadas públicamente y digan “no van a permitir que eso ocurra”, cuando tuvieron todo el tiempo y posibilidades de impedir llegar a la situación actual; diciendo que desconocían que la policía y el instituto penitenciario torturan y maltratan a los presos con total impunidad.
Es, igualmente, una responsabilidad del Poder Judicial de dar seguimiento a los detenidos y el tratamiento que reciben en las prisiones y comisarias.
Las autoridades provinciales y jurídicas deben dar explicaciones sobre la falta de control y seguimiento en cárceles y comisarías y la ausencia de políticas de derechos humanos.
Hoy se declama mucho sobre los derechos humanos, pero poco se hace para su vigencia en la vida cotidiana y práctica en las políticas públicas.
Las autoridades deben tener presente que, quienes violan los derechos humanos son los gobiernos, y que son valores indivisible en la construcción democrática